La religión: Un sentimiento especial

La religión, en Andalucía, se vive de manera muy intensa. La confesión más profesada es el catolicismo, con gran diferencia respecto a otras ramas del cristianismo y a otras religiones del mundo. De hecho, se trata de una de las regiones más católicas de España, según indican los datos oficiales manejados por el Gobierno de España. En esta página te contamos cómo viven los andaluces la religión, una devoción que llega transversalmente a toda la sociedad.

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Semana Santa en Andalucía
Semana Santa en Andalucía

Según datos del Barómetro del CIS (Centro de Investigaciones Sociológicas) sobre la religión, en Andalucía hay muchas personas que se declaran creyentes. En concreto, esta es la tercera región en cuanto a católicos practicantes (22,3%) y a católicos no practicantes (55,3%), solo por detrás de los vecinos murcianos y extremeños.

Sin embargo, no es menos es cierto que la secularización de la sociedad andaluza también se hace sentir en nuestros días, al igual que en el resto de España y, en general, en el resto del mundo occidental. Como demuestran otros estudios del Instituto Nacional de Estadística, año tras año desciende el porcentaje de adultos que se casa por la Iglesia, de niños que se inician en los sacramentos o de creyentes que van a misa.

A pesar de todo ello, bien podemos asegurar Andalucía que es la primera región española en un aspecto intangible de la religiosidad: la intensidad del sentimiento de sus fieles y la espectacularidad en la forma de demostrarlo.

Y es que la religión en Andalucía va más allá de la fe, para convertirse en una expresión más de la propia sociedad. Como suele decirse habitualmente, muchos andaluces siguen sus procesiones de Semana Santa, sus romerías o sus fiestas patronales “por devoción o por tradición”. Por tanto, las celebraciones religiosas a menudo congregan no solo a católicos practicantes, sino también a personas no creyentes, que de todas maneras se suman al evento para preservar la tradición.

Para muchos viajeros, la religión en Andalucía es un atractivo turístico en sí mismo. Y prueba de ello es la gran afluencia de visitantes en determinadas fechas del año, relacionadas con las celebraciones litúrgicas y otras manifestaciones de fe.

Sin duda, la Semana Santa es el periodo más importante en lo referente a la religión en Andalucía. Son días en los que la región late al ritmo de las procesiones, que salen de las principales iglesias, basílicas y catedrales. Los días grandes son el Jueves Santo, el Viernes Santo y el Domingo de Resurrección, aunque también hay importantes salidas el Domingo de Ramos y el Sábado Santo.

Otra gran manifestación de la religión en Andalucía son las romerías. Con este nombre se conoce a las peregrinaciones que se hacen desde un núcleo urbano hacia una ermita o lugar santo. Allí espera una talla o una reliquia famosa, que es sacada a su vez en procesión para la contemplación por parte de sus fieles. Sin duda, la más famosa es la romería del Rocío, que se celebra el Lunes de Pentecostés en la aldea del Rocío, en Almonte, provincia de Huelva.

Otras romerías de enorme seguimiento, tradición y belleza son la de la Virgen de la Cabeza en Andújar (Jaén), la de de San Isidro Labrador en Teba (Málaga) o las muchas que se producen en la provincia de Córdoba, como la de Nuestra Señora María Santísima de las Veredas Coronada en Torrecampo, la de Nuestra Señora de Gracia de Alcantarilla de Belalcázar, la de la Virgen de la Sierra en Cabra, la de la Virgen de Araceli en Lucena. No obstante, las romerías se realizan a lo largo y ancho de toda la comunidad.

Otros fiestas religiosas

Además, existen otras fiestas y celebraciones estrechamente ligadas a la religión en Andalucía. No son procesiones de Semana Santa ni romerías, pero tienen gran sentimiento y son siempre interesantes a ojos de los turistas. Hablamos, por ejemplo, de las Cruces de Mayo y el Corpus, ambas en Granada, las procesiones marineras en honor de la Virgen del Carmen o las innumerables fiestas patronales que se concentran principalmente en verano en todos los municipios andaluces, sea cual sea su tamaño.

Conviene recordar que España es un país aconfesional, es decir, que no profesa ninguna religión de manera oficial. Y su Constitución consagra la libertad de culto, por lo que el catolicismo no es la única religión de Andalucía. Existen otras confesiones cristianas diferentes al catolicismo, así como otras religiones totalmente diferentes que, aunque minoritarias, pueden ofrecer algunos aspectos interesantes de cara al turista.

Estas otras religiones diferentes al cristianismo están presentes en Andalucía por cuestiones de inmigración o por los complejos lazos históricos a los que hemos hecho mención en la página de Historia. Destacan los cristianos evangélicos, muchos de los cuales son de etnia gitana, mientras que otros muchos son ciudadanos latinoamericanos. Cristianos numerosos son los anglicanos, los luteranos o los mormones. Poca presencia tienen también los hinduistas y los budistas, solo presentes en comunidades dispersas.

Mención especial merecen las otras dos religiones monoteístas: el Islam y el judaísmo. Los musulmanes, son bastante numerosos, mayoritariamente magrebíes, llegados mediante procesos migratorios, pues Andalucía es la región española más cercana a este espacio geopolítico, con excepción de las ciudades de Ceuta y Melilla, que tienen frontera terrestre con Marruecos. La evidente influencia del mundo andalusí en la actual Andalucía sirve, además, de factor de atracción para muchos ciudadanos musulmanes.

Los judíos, por su parte, son considerablemente menos numerosos que los musulmanes, pero ocupan un lugar importante dentro del panorama de la religión en Andalucía. La expulsión por parte de los Reyes Católicos en 1492 de los sefardíes (judíos de los antiguos reinos medievales de la Península Ibérica) supuso un trauma para aquella sociedad, que en sus lugares de acogida mantuvo vivo el recuerdo del episodio, conservando a su vez algunas tradiciones, como la lengua sefardí, muy similar al castellano antiguo. Se trata de un episodio que, a pesar de haberse producido más de cinco siglos atrás, tiene su conexión con el mundo actual, pues una ley aprobada recientemente contempla el otorgamiento de la nacionalidad española para aquellas personas extranjeras que puedan demostrar su origen sefardí. Y ello ha supuesto un estímulo para la llegada de muchos judíos a Andalucía. La red de juderías Sefarad y la existencia de museos judíos en diferentes localidades ha supuesto también otro factor de atracción para que vengan muchos turistas de esta religión a Andalucía.